¡Tengo Tos! ¿Qué hago?

¿No sabes qué hacer con los síntomas de la tos? Esto puede representar un verdadero problema y máxime si tienes que salir de casa y compartir espacios con otras personas ya que ya casi nadie está dispuesto a tolerar infecciones respiratorias tan comunes como la tos por el inminente riesgo de que sea COVID. Por otro lado, es que es tan molesto y cansado completar una jornada de actividades con las dificultades respiratorias y molestias que implica la tos.

Sorprendentemente y contrario a la idea que se mantenido, la tos es un mecanismo de defensa de nuestro propio sistema ante diferentes factores del ambiente; de manera más puntual, la tos se desarrolla principalmente al hacer su parte para  despejar las vías respiratorias por la presencia de partículas de polvo u otros cuerpos extraños, este mecanismo sirve para expulsarlos hacia el exterior a partir de la cantidad de aire que sale de los pulmones.

Los expertos determinan que existen dos tipos de tos y están categorizadas como productiva y no productiva. La primera produce flema y mucosidad, para limpiar los pulmones, la segunda conocida como no productiva o tos seca no produce flemas ni mucosidad y se centra en la salida brusca de aire por los pulmones.

Para ponerle fin lo que debes hacer es: tomarte un día de reposo si los síntomas son muy debilitantes, beber infusiones para mejorar tu estado de ánimo y agregar un caldo de verduras a tu comida del día. Si no los tratas, los síntomas pueden tardar hasta dos semanas en desaparecer por completo, pero para que todas las molestias y síntomas de la cansada tos acaben de una vez debes usar el increíble Rayo Vaporizante. Descongestiona de manera sorprendente las vías respiratorias ayudándote a respirar aliviado por más de 8 horas. Aplicarlo es bastante sencillo: toma una pequeña cantidad y ponla dando un pequeño masaje en el pecho y espalda y ¡listo!

Un remedio infaltable para cuando quieres recuperarte a las de ya es preparar una Vaporización con Rayo Vaporizante, esto de verdad es milagroso. Calienta un litro de agua, puedes agregar las hierbas que más te ayuden, podría ser manzanilla o eucalipto fresco y una cuchara de Rayo Vaporizante, cuando todo esté integrado ponlo en un lugar cómo y seguro para que puedas inhalar lo mejor posible alternando haciendo ejercicios de respiración recibiendo los humos de la vaporización.